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El primer sintetizador de voz
Kempelen había comenzado su trabajo antes de Kratzenstein, en 1769 y, después de 20 años de investigación, publicó un libro donde explicó sus estudios sobre la producción humana de voz y los experimentos realizados con su máquina que, probablemente, sonaba como una especie de bocina. Las piezas esenciales de la máquina eran: un fuelle que simulaba los pulmones, un silbato que actuaba como las cuerdas vocales, y un tubo de cuero para simular el tracto vocal.
Manipulando la forma del tubo de cuero se podían producir diversos sonidos vocálicos. Las consonantes eran simuladas con cuatro pasos estrechos separados y controlados por los dedos. Antes de de las demostraciones de von Kempelen, la laringe estaba considerada como el centro de la producción del habla, pero sus estudios le condujeron a la teoría de que los puntos principales de la articulación acústica estaban en el tracto vocal, las cavidades entre las cuerdas vocales y los labios.
Lamentablemente, los trabajos de Kempelen recibieron cierta publicidad negativa debido a que anteriormente presentó una máquina que jugaba al ajedrez, pero que en realidad era un autómata controlado por un enano escondido en el interior de la mesa. Este hecho fue descubierto por un jugador experto de ajedrez y, aunque construir algo así ya tenía mérito en aquella época, su máquina generadora de voz ya no fue tomada en serio.
Más tarde fueron surgiendo más maquinas de este tipo, como la máquina de hablar de Charles Wheatstone, de mediados de 1800, basada en la de von Kempelen, que era un poco más complicada y capaz de producir algunas palabras completas. Después, en 1930, se empezaron a realizar los primeros sintetizadores electrónicos y, en 1950, los primeros sintetizadores implementados en un ordenador, hasta llegar a nuestros días, donde tenemos sintetizadores muy realistas, pero que están limitados por la calidad del sonido que puede producir un altavoz. Los humanos no tenemos tal limitación, por eso, para que la voz de los robots sea en un futuro lejano indistinguible de la de los humanos, se les dotará de sintetizadores de voz basados en el diseño mecánico de Kempelen.
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